Cuando la buena música supera la crisis. Crónica del 38º Festival Internacional de Música de Cambrils.
Ni los escasos presupuestos para cultura, ni el calor intenso han podido parar al Festival Internacional de Música de Cambrils , transformando la cita en una interesante muestra de música de factura local. Jazz, tango, flamenco, pop, gospel y folk confluyeron en un programa generoso en calidad y ajustadísimo en lo económico. Notándose como única presencia "mediática" la de un Miguel Bossé reinventado por enésima oportunidad y acaparando (como siempre) multitudes para estadios de fútbol. Pero, lejos de las grandes muchedumbres, otras músicas que requieren de una atención más sensible, también lograron convocar una asistencia de público razonablemente abundante. En el concierto (Parc del Pinaret) de Andrea Motis y Joan Chamorro contamos más de seiscientas personas. Otro tanto sucedió con el clamoroso cierre de Las Migas en el mismo espacio al aire libre (y húmedo).