Escribe Marcelo Espiñeira. La amenaza electoral del polémico candidato ultraderechista brasileño Jair Bolsonaro finalmente se transformó en una clara victoria por el 55% de los votos en la segunda vuelta. Tras treinta años como diputado y una militancia hasta en ocho partidos políticos diferentes, el excapitán del ejército asumirá en enero próximo como presidente del mayor país sudamericano, y novena potencia económica mundial. Protagonista de una escandalosa campaña en el más puro estilo de Donald Trump , Bolsonaro negó los canales tradicionales del debate con sus rivales, difamó a los mismos de manera insultante, y prometió medidas, que de cumplirlas, pondrían a prueba la resistencia de los propios cimientos del sistema democrático de su país. En opinión de los analistas locales, el atentado contra su vida sufrido en la primera parte de la campaña (fue apuñalado en la vía pública) facilitó el triunfo del polémico candidato. Un fuerte sentimiento anti-PT , atribuido al