María Coma construye su música con la paciencia y dedicación de un monje budista. Su arte parece aislado, un producto sin contaminaciones, canciones caídas desde cualquier otro lugar menos donde estemos parados ahora mismo.
Su disco “Linòleum” levanta paredes sólidas y evanescentes al mismo tiempo, iluminadas por la luz de sus sueños y la oscuridad de sus temores.
Si cantara en inglés, y hubiera nacido en Brooklyn, es probable que nos llegarán noticias envueltas en neón, promocionando su nueva irrupción en el cielo del pop. Pero, ella vive en el barrio de Gràcia, en Barcelona, y canta y escribe en catalán.
Su impacto no será planetario, aunque sus canciones merezcan la mayor atención. Por eso esta entrevista con María.
Una entrevista de Marcelo Espiñeira.
Con solo 23 años y ya tienes un disco tan hermoso. Háblanos de él.
MARIA COMA: Bueno, tiene un año de trabajo atrás. No ha sido de golpe lo de hacer este disco. Tuve otros proyectos anteriores y llevo un tiempo ya componiendo y toda la vida estudiando música.
Toda la vida… igual no puede ser tanto tiempo.
Y con U_mä también habías rodado mucho, verdad?
Sí, fue un año de gira. De momento es un proyecto que tenemos latente con Pau Vallvé. Y paramos porque luego de 30 bolos nos venía bien cambiar de aire un poco, y también para darle espacio a esta música nueva.
Necesitabas componer fuera de U_mä?
El piano tiene verdadera importancia en tu música.
En los conciertos sobre todo. Esta importancia del piano responde a la estructura de canción que tiene mi música. Igual se podrían defender con cualquier instrumento armónico, con una guitarra también.
También cantas estupendamente.
Se detecta una estructura muy jazzística en tus canciones.
Sí, depende qué canción. A mí me gusta mezclar bastante. Hay temas que suenan más clásicos, por la armonía y por el arreglo. "Cel salat" o "Pobre desig" tienen un punto más épico. Y al toque más jazz lo veo más en el directo. Por la sonoridad y por como tocamos los tres músicos.
Si bien te confiesas muy fan de gente como Bjork, tu música es absolutamente origina y lo suficientemente distanciada de cualquier artista consumado.
Su disco “Linòleum” levanta paredes sólidas y evanescentes al mismo tiempo, iluminadas por la luz de sus sueños y la oscuridad de sus temores.
Si cantara en inglés, y hubiera nacido en Brooklyn, es probable que nos llegarán noticias envueltas en neón, promocionando su nueva irrupción en el cielo del pop. Pero, ella vive en el barrio de Gràcia, en Barcelona, y canta y escribe en catalán.
Su impacto no será planetario, aunque sus canciones merezcan la mayor atención. Por eso esta entrevista con María.
Una entrevista de Marcelo Espiñeira.
Con solo 23 años y ya tienes un disco tan hermoso. Háblanos de él.
MARIA COMA: Bueno, tiene un año de trabajo atrás. No ha sido de golpe lo de hacer este disco. Tuve otros proyectos anteriores y llevo un tiempo ya componiendo y toda la vida estudiando música.
Toda la vida… igual no puede ser tanto tiempo.
Ya, ya, pero comencé desde los seis años con el piano, con conocimientos de coral, solfeo y todo el rollo en plan clásico. Y más tarde, a los 16 empecé a trabajar con proyectos de grupos con amigos y tal. Creció mi interés por la música moderna y terminé apuntada a una escuela de jazz, donde estudié armonía, composición y canto. Y de la mezcla de todo, pues ha salido el "Linóleum".
Sí, fue un año de gira. De momento es un proyecto que tenemos latente con Pau Vallvé. Y paramos porque luego de 30 bolos nos venía bien cambiar de aire un poco, y también para darle espacio a esta música nueva.
Necesitabas componer fuera de U_mä?
Sí, tenía grabaciones caseras desde hace tiempo. Algo cutres, coincidiendo con mis inicios en esto del sonido. Y finalmente tuve la oportunidad de grabarlas bien, ya que Pau tiene su estudio y se ofreció a producirlas cuando le enseñé mis maquetas. Buscamos el tiempo y nos pusimos en ello. Y la verdad es que tenía muchas ganas de hacerlo, tenía muchas ideas para un cuarteto y en este proceso he aprendido montón de cosas. Ya he superado esa incertidumbre que te genera no saber como grabar tus ideas.
El piano tiene verdadera importancia en tu música.
En los conciertos sobre todo. Esta importancia del piano responde a la estructura de canción que tiene mi música. Igual se podrían defender con cualquier instrumento armónico, con una guitarra también.
También cantas estupendamente.
Gracias, muchas gracias. En el directo a veces se complica reproducir el resultado del disco, por los coros y la superposición de voces, pero estoy feliz por como está quedando todo.
Sí, depende qué canción. A mí me gusta mezclar bastante. Hay temas que suenan más clásicos, por la armonía y por el arreglo. "Cel salat" o "Pobre desig" tienen un punto más épico. Y al toque más jazz lo veo más en el directo. Por la sonoridad y por como tocamos los tres músicos.
Si bien te confiesas muy fan de gente como Bjork, tu música es absolutamente origina y lo suficientemente distanciada de cualquier artista consumado.
Es verdad que este disco no me recuerda a otros músicos. Pero sí, soy muy fan de Bjork, y también de Chet Baker, que es mi favorito. También me gusta mucho la bossanova, Jobim sobre todo. Y Patrick Watson y Hanne Hukkelberg. Pero intento de componer en mi estilo.
Y cómo están defendiendo este disco?
Estamos tocando bastante, prácticamente una vez por semana. Parece que no, pero si lo buscas puedes llegar a tocar muy a menudo. Estamos contentos, porque de momento donde vamos se llena y el público resulta super agradecido.
Tus letras me parecen muy interesantes, salen de lo común y son muy visuales.
Yo creo que es más bien la forma de escribir que no los temas que trato. Porque al final, creo que trato los mismos temas que todo el mundo. Es posible que haya un punto naive, que no se encuentra tanto en la música de otros grupos. Mi forma de explicarlo pasa más por la sensación o la imagen, es algo más metafórico, poético. Y como me sale así, por eso la gente lo recibe diferente.
Los gatos son un tema recurrente. Vives rodeada de gatos en tu casa?
(Risas)… No, no tengo ni uno. Es que relaciono una parte de mi infancia con los gatos, y cuando me pongo naive… me sale hablar de ellos. Fueron saliendo en dos o tres canciones y terminaron en la portada también. Es un dibujo de Miu Mirambell, que es una ilustradora de Vic que siempre dibuja gatos en este estilo tan chulo y le pregunté si no me quería dibujar. Me hizo unos cuantos dibujos, me gustaron y me quedé con uno para la portada. Y ahora… parece algo conceptual (se ríe) pero no lo es.
Y además de gatos, que buenos músicos tienes.
Sí, y tanto. Tanto Pau en batería y como el Jordi en bajo son increíbles, estoy encantada. Los dos saben mucho, tienen una gran formación, puedo decir que tengo muy buenos músicos.
Continúas estudiando?
Bueno, yo digo que con la música no acabas nunca. Hace dos años acabé con armonía moderna. Pero sigo estudiándolo en particular porque quiero aprender más y esto es la típica cosa que no se acaba nunca. Siempre hay secretos por descubrir. Es muy extraño, pero es así. Sigo estudiando piano, armonía, composición y voz. Continúo buscando mi propia forma de tocar y siempre tienes que practicar mucho.
También tienes conocimientos de audiovisual, no?
Sí, me acabo de graduar en audiovisuales. El video de "Gat" lo realicé con Clara Vallvé, sobre mis propias ideas. Está realizado con técnicas de stop motion y ahora será exhibido en el Animac de Lleida. Y el de "Mil orelles" lo hizo Lyona con dos cámaras pequeñas. También está en producción el tercero, que será del tema "Segons". Lo están haciendo unos chicos, y yo solo aprobaré algunas decisiones, pero no tocaré nada en la realización. Y tengo ganas de hacer más clips.
Está claro que eres apasionada por el detalle.
Sí, cuando comencé a indagar en la música electrónica, en lugar de usar los típicos sampler que vienen configurados, me dediqué a grabar muchísimos objetos y sus diferentes sonidos. En "Mil orelles" se distinguen bien que es cada cosa. Desde una botella de agua, hasta unos clavos pequeños, etc. Pero en "Placenta" hay una batería electrónica al principio que está hecha con hilos de nylon estirados con los dientes y que producen un sonido muy particular, y que pasan por algo electrónico.
Digamos que tienes orejas para todo.
Sí, exacto (se ríe).
Comentarios
Publicar un comentario