Siempre inquieta, Zahara se ha propuesto dar rienda suelta a su música en una segunda producción de note corte independiente. Por sonido, imaginario y actitud, "La pareja tóxica" (Music Bus, 2011) es un disco emparentado con la frugal escena pop catalana. Aunque cantado en español, claro está. Zahara se desfoga (como ella sugiere literalmente en esta entrevista) en una grabación despojada de aquella patina de radiofórmula que portaba su ya lejano primer disco "La fabulosa historia de..." de 2009. Sus nuevas canciones tienen humanidad, suenan a madera crujiendo, caminan lento pero seguro, vienen envueltas en una poesía feroz y saben a buena cosecha.