Una entrevista de
Marcelo Espiñeira.
Luego de saltar las primeras vallas que suelen atenazar a la gran mayoría de los músicos jóvenes cuando se deciden a andar en este negocio, los cuatro integrantes barceloneses de Mine! (Albert en voz y guitarra, Bernat en voz, guitarra y piano, Ricky en batería, piano y voz, Oriol en bajo , violonchelo y voz) han decidido que quieren más.
Tras algunos meses de silencio, regresan con cuatro canciones nuevas, grabadas de manera más austera que su último disco (Un brindis pel nen androïde), con resultados igualmente sorprendentes. El nuevo EP “Las maresmes maleïdes” ofrece la mejor cara de Mine!, un sonido muy audaz y una apuesta certera por el ingenio creativo de cada uno de sus miembros.
Las canciones pertenecen una a cada músico del cuarteto, un juego singular que nos remite a sus admirados Beatles (donde todos componían); y para su registro sólo han contado con la ayuda del técnico Iban Rodriguez en los estudios Selva de Mar.
Al respecto Albert aclara que: “no hubo nada demasiado pensado, queríamos escribir por separado sobre un mismo tema y ver qué sucedía. Para nuestra sorpresa, todo encajó muy bien y entre todos trabajamos estas canciones con mucho cariño en el estudio”.
El concepto que amalgama el nuevo material de Mine! gira en torno al mar y un personaje inconforme consigo mismo y todo lo que le rodea, estableciendo un inequívoco paralelismo con la situación artística del grupo. A lo que Albert contesta que: “No siempre llenas los huecos de la felicidad cuando más lo esperas. Cuando parece que lo tienes todo, necesitas otras cosas, no? “...haciendo gala de un existencialismo que brota a flor de piel, como en las letras de sus canciones.
Mine! se siente parte de esta escena exitosa de pop catalán, son fieles representantes, y en 2010 su disco fue de los mejores en este rubro o sector del mercado. Aunque este éxito nada tenga que ver con dinero. “Estamos en esto por estricto amor al arte, sino tuviéramos claro este aspecto no podríamos seguir adelante con lo que hacemos” sugiere Albert, y aprovecha para explicar lo que cree que ha sucedido con este auténtico boom del pop catalán: “No se muy bien si existe un movimiento de pop catalán. Yo diría que no, sólo somos una generación que se ha quitado el complejo de cantar en nuestro idioma habitual. La música en catalán estaba muy estigmatizada, si cantabas en catalán tenías que sonar como Sau o Sopa de Cabra y todo eso, no?”.
Movimiento o no, muchos de los mejores discos que se han editado en España durante los últimos años provienen de Catalunya y muchos están cantados en catalán. Y Mine! integra este fenómeno, que desde el punto de vista estríctamente artístico goza de una salud envidiable.
“Les maresmes maleïdes” es otro ejemplo que corrobora esta idea. Un pequeño EP donde los Mine! se sueltan definitivamente, consiguen climas muy interesantes, sirviéndose de melodías ondulantes, incorporando el piano a sus recetas y manteniendo la frescura que tenían en sus trabajos anteriores.
Un ejercicio creativo de un puñado de inconformistas convencidos de su lenguaje.
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